GENERAL ROCA – Para los jueces de la Cámara Tercera del Crimen no existieron dudas. El cabo de la policía rionegrina que el año pasado disparó su arma reglamentaria contra su ex pareja y sus hermanos en un barrio ubicado en la zona norte de Roca “tuvo voluntad de matar”.
Es por eso que ayer lo condenaron a 10 años y 6 meses de prisión por el grave ataque que casi le cuesta la vida a las tres personas.
Ayer al mediodía se leyó la sentencia en la Ciudad Judicial. El primer voto le correspondió al juez Aldo Rolando quien dio por acreditado el sangriento episodio ocurrido el 12 de septiembre del año pasado. Fue esa noche que el policía Fabio Cofré llegó a la casa de Perito Moreno 2969.
Allí tomó contacto con su ex pareja, Natalia Candia, con quien intentaba retomar una relación sentimental. “Extrajo el arma de fuego y le propinó dos disparos con voluntad homicida”, aseguró el magistrado. Uno de ellos le dio en el brazo derecho y el otro en la rodilla.
Agregó que “renovando su voluntad de dar muerte” la siguió hasta el interior de la casa. Pero allí se cruzó con el hermano de la víctima, Cristian, a quien también le efectuó otros cuatro disparos a corta distancia que le provocaron lesiones graves en el pecho y en una pierna. Gonzalo Candia, el otro hermano de la joven también fue víctima del accionar del policía. Lo sacó de su camino disparándole en una pierna.
Después de ese sangriento escenario y todavía en el interior de la casa, tomó del cuello a su ex pareja y le apoyó la pistola 9 milímetros en la cabeza. Gatilló el arma dos veces y no la mató porque había perdido el cargador en medio del forcejeo con uno de los hermanos Candia.
Los jueces le impusieron una pena de 10 años y 6 meses de prisión por la tentativa de homicidio de Natalia Candia en concurso ideal, con tentativa de homicidio “inidonea”. En conjunto con la tentativa de homicidio dirigida contra Cristina y las lesiones graves dolosas ocasionadas a Gonzalo. (DRN)